Feliz San ValentÃn
- Dra. Birgit Farthmann
- 14 feb
- 2 Min. de lectura
Las emociones y los sentimientos se ven reflejados en nuestra salud y, por ende, en la calidad de nuestro cutis.
Una serie de mediadores neuronales y de hormonas son los responsables de las sensaciones de placer y bienestar.
La primera es la dopamina, que es el gran neurotransmisor del placer, y que se activa simplemente al estar en contacto con una persona que nos gusta y nos atrae. A esta la sigue la fenilendiamina, que es la que nos produce la sensación de estar en una nube, y la norepinefrina responsable de la sensación de euforia. Cuento todo esto, para que nos hagamos una idea de cómo el cerebro maneja a nuestra bioquÃmica y de cómo la bioquÃmica maneja al cerebro.
Asà afecta la oxitocina a la piel: Conforme tenemos contacto fÃsico o sexo con la persona deseada, va a ser la oxitocina la responsable de nuestra sensación de plenitud y bienestar. Un simple abrazo hace que generemos más oxitocina.
Hoy en dÃa sabemos que las células de la superficie de la piel, los corneocitos generan también oxitocina, con la simple presión de una mano amiga. De ahà que si nos hacemos daño y una persona nos hace una caricia en la zona dañada nos sentimos inmediatamente un poco mejor. También el hecho de aplicarnos una crema, activa esos mismos corneocitos, y las áreas del placer en nuestro cerebro.
Cuanto más nos acaricien y nos abracen, más oxitocina liberaremos y tendremos una mayor sensación de bienestar. Por el contrario, una baja cantidad de oxitocina influye negativamente en todas las enfermedades inflamatorias de la piel como la psoriasis, los eccemas o el acné. Y la falta de esta substancia hará que tengamos la piel más apagada, marchita y envejecida.
En el amor, el aumento de la dopamina acelera la circulación, aumentado el aporte de oxÃgeno en la piel. Esta se vuelve brillante y luminosa. La dopamina hace que desciendan los niveles de cortisol, la hormona del estrés y una substancia enormemente oxidante y proenvejecimiento. Asà que no hay nada como enamorarse, abrazarse y besarse para tener una piel maravillosa y disfrutar de lo mejor de la vida.
